miércoles, 20 de febrero de 2013

"Las vueltas de la vida" Capitulo 18

Hola chicas 
Inma: ¿Sabes que me pasa contigo? Cada vez que leo un comentario tuyo me sale una sonrisa. Es como que tienes MUY BUENA ONDA y me alegra mucho que siempre leas.

Fatima Pino Servián: tiene nueva nove pasen :) elrulosiemprevuelveconcasiangeles.blogspot.com.es

Valen: Tu comentario me puso a pensar mucho.
1° La maratón obvio la voy a hacer, se las debo.
2° Lo del corto laliter nunca lo habia pensado, no se si me salga bien pero tal vez lo intente, me intereso la idea
3° Estoy de acuerdo contigo, pero esa nove la acabe porque no estaba muy bien de animos y queria acabarla bien y pronto para comenzar otra. Podría hacer un Epilogo ¿te parece?

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No tengo palabras para pedir disculpas simplemente se me hace imposible subir seguido pero prometo que voy a terminar esta historia pronto ... son muchos cambios que estoy viviendo, ya no quiero o no se si estudiar lo que antes creía que era algo seguro y donde voy a estudiar....perdon por estar desaparecida UN MES....mañana otro SEGURISIMO

CAPITULO DEDICADO A CAMI Y XIME QUE SE ACORDARON DE MI CUMPLE HOY!!! LAS QUIERO MUCHO



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Peter: La espera un segundo –dije abrazándola cuando entramos en la oficina-

Lali: ¿Qué pasa? –Paso sus brazos por mi cuello y acaricio mi nuca-

Las vueltas de la vida

Capítulo Dieciocho


Peter: Me encanta tenerte así –la atraje más a mi cuerpo-

Lali: ¿Así como?

Peter: Así, entre mis brazos- apreté mi agarre- Me siento como… completo

Lali: -sonrió-  A mí también me gusta estar así – se acercó y rozo sus labios con los míos – y besarte

Unimos nuestros labios y gracias a Dios Peter me tenía agarrada porque sentí como mis piernas se volvían de gelatina.

Lali: No se vale que hagas esto –me aleje bruscamente de el-

Peter: ¿Qué paso? ¿Qué hice? –dijo con preocupación

Lali: Que cada vez que me besas siento que me fallan las piernas –dije con un puchero- Soy muy débil a tus encantos y eso no es bueno

Peter: A mí me parece buenísimo –sonrió de oreja a oreja- porque a mí me pasa lo mismo con a vos –me acaricio la mejilla- me tenés completamente hechizado

Lali: -sonreí- Bueno no más, tenemos que ir a trabajar

Peter: ¿Queres que nos vayamos juntos a la casa? –dijo entusiasmado-

Lali: Me encantaría, pero no puedo



Peter: ¿Por qué? ¿Tenés que ir a ver a alguien? –dijo celoso-


Lali: -reí- No seas celoso, no puedo porque traje mi carro y no lo quiero dejar acá


Peter: Ah! – Mucho más relajado- Entonces nos vemos en la casa

Peter se fue a su oficina y yo me quede en la mía haciendo unos cuantos diseños para las próximas publicidades. Mi trabajo siempre me había encantado y cada vez que estaba haciendo alguna idea o diseño nuevo se me olvidaba  todo mi entorno y el tiempo se me pasaba volando, así que cuando quise darme cuenta ya eran las 19:30 hs y tenía que haber salido hace una.  



Agarre mis cosas y Salí de la oficina, ya no había mucha gente en las oficinas así que me despedí de los pocos que estaban y subí a mi auto. Llegue aproximadamente en 25 minutos y cuando pase la puerta escuche una música en volumen muy bajo, que casi no se podía escuchar por las risas, los gritos y las voces alegres que se escuchaban en el salón. Rochi se dio cuenta de mi llegada y me abrazó cuando atravesé la puerta.


Rochi: Hola La –me abrazo- ¿Cómo te fue?

Lali: Bien, se me paso el tiempo en la oficina –hice una pausa- ¿Estamos celebrando algo?

Rochi: Vinieron de visita tu tío y su esposa, estamos todos comiendo.

Lali: ¿Tío Gonzalo? –pregunte alegre-

Rochi: -rio- Que bueno que estés alegre porque tu tío está muriéndose por verte, se nota que sos su sobrina favorita –reímos-

Lali: -sonreí- Lo amo al tío Gonzalo. Es lo más.


Entre al salón y era una escena muy parecida a la que me estaba imaginando en mi cabeza. Estaba mi tío Gonzalo estaba hablando en la punta de la mesa y absolutamente todos estaban hipnotizados con él y sus historias. Si de por si su contextura ancha y musculosa, su cabello rubio cortado perfectamente y su cara con la misma sonrisa de papa que aun a su edad seguía sacando suspiros su simpatía, su humor y su forma de ser, hacía que  te enamoraras completamente del cuándo lo conocías.

Desde pequeño habíamos tenido una conexión inexplicable, si bien con mi papa éramos demasiado unidos y lo amaba como a nadie, con mi tío era impresionante como nos complementábamos.

De espaldas a mi estaban Peter, Agustín, Nico y Gastón y en el otro lado estaba mi querida hermana Paula –comiéndose con los ojos  a Peter- Cande, Emi, la esposa de mi tío Claudia y dos puestos vacíos.

Mi tío alzo su cabeza y tan pronto me vio una sonrisa enorme apareció en su rostro y estoy segura que yo estaba igual.

Gonzalo: Mi pequeña –se levantó y vino corriendo a abrazarme- Pero que grande que estas- dijo dándome vueltas en el aire-

Lali: ¡Tío! ¿Cómo estás? Hace mucho no te veo –dije todavía en sus brazos

Gonzalo: Pues como me vas a ver si te fuiste y me abandonaste –dijo soltándome para mostrarme su puchero

Lali: -reí- Sabes que no es así tío, sería imposible olvidarme de vos

Paula: Ay si, ya entendimos –dijo con su peor cara de mal humor- ¿Ahora podríamos comer? Piti nos estaba contando algo –dijo esto último con voz sensual mirando a Peter

Rochi: ¿Piti?-reprimió una risa

Paula: Claro, es el apodo de cariño para él, se supone que los novios se ponen apodos cariños, ¿ o no, mi amor? –se levantó corriendo y le dio a Peter un beso en los labios.

Lali: ¿Novios? –dije tratando de sonar serena cuando en realidad sentía que me estaba muriendo por dentro-
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Besos
Mery